Manifestó que enfrentamos tres grandes riesgos; uno en el plano monetario que podría derivar en una hiperinflación, otro en el plano fiscal que podría repercutir en un default, y de materializarse estos dos podríamos estar frente a una hecatombe social. El FMI cree -al igual que el gobierno nacional- que nuestro país a partir del segundo trimestre va a hacer lo que se conoce técnicamente como un punto de giro, dejando de caer para empezar a crecer. Es una visión equivocada, ya que vamos a ver solo un base de comparación con un segundo trimestre muy malo del año pasado. El peso del campo solo nos va a hacer ver un número positivo y que la economía va para adelante; aunque pasado su efecto todo se diluirá nuevamente y los indicadores volverán a mostrar que todo vuelve para atrás.
Escuchá la entrevista a Javier Milei.