Preocupado, reconoció sus errores y consideró ser víctima de estos prejuicios que dominan a la actividad desde siempre, ampliando la grieta ya no con el gobierno sino con la sociedad Argentina.
Buzzi, alzó su voz crítica y reflexiva en el marco de uno de los actos conmemorativos por los 10 años de resolución 125, que intentó modificar de manera móvil el porcentual de aranceles de exportación sobre el grano de soja.
El encuentro se produjo en el establecimiento de Gerardo Colotti, ubicado sobre la ruta 9 en el kilómetro 385 entre las localidades Cañada de Gómez y Armstrong; y contó con la presencia de todos los dirigentes de aquella época, entre los que se destacaron Mario Llambias (CRA), Luciano Miguens de la Sociedad Rural Argentina, Carlos Garetto de Coninagro y el actual senador Nacional, Alfredo De Angeli.
En ese marco, varios consideraron que la lucha por ese reclamo económico casi termina debilitando la institucionalidad del país, aunque también destacaron que no se aprovechó la experiencia, ya que no existe una dirigencia fuerte y representativa de los productores agropecuarios para continuar avanzado en el desarrollo del sector y el país.
“Falta generosidad, aptitud y capacidad para entender al sujeto agrario vigente. También aprender del pasado que muestra a los productores con intereses, objetivos comunes y un amplio nivel de afinidad en muchos puntos”, resaltó Eduardo Buzzi agregando que los resultados solo se consiguieron cuando el campo actuó en conjunto.
Al mismo tiempo, apuntó sobre la ausencia de los temas estructurales del agro en la agencia política de nuestro país, enfatizando que no es excusa la afinidad con el gobierno actual para dejar de lado esas discusiones.
“Se necesita más realismo, tomar distancia y analizar con más objetividad. Hace falta gente lúcida, buenos administradores y bien formados para que estén a la altura de los nuevos desafíos. Es un momento de dirigentes con cierto nivel de intrascendencia. Están dejando al sector afuera, porque no hay estrategias, protagonismo y osadía”, dijo Buzzi remarcando que hace falta volver a montar escenarios para que hechos como las inundaciones y sequía no anticipen los temas y discusiones.
Nueva 125
Por ahora, la vieja dirigencia reconoce la necesidad de ser productivista y actuar por encima de las preferencias políticas.
Según Mario Llambías (CRA), el campo debe mantener la preocupación por los productores lecheros, chancheros y los del segmento de la carne, considerando que además de producción, hay mucha gente que se está quedando sin trabajo.
“Porque no hacen las cosas bien, así se olvidan de nosotros”, recomendó el dirigente alzando el accionar y los inicios de la Mesa de Enlace de Entidades Agropecuarias.
El dato, también apuntó a la falta de persistencia para que el campo continúe en la esfera de las decisiones políticas y las proyecciones hacia adelante.
“No dejemos la silla vacía, ni la rienda en el suelo por más que tengamos un gobierno afín”, recomendó el Ing. Carlos Garetto.
Al cierre, la discusión se centró en la pelea del campo con la sociedad por las nuevas problemática ambientales y legislaciones sobre agroquímicos o productos fitosanitarios.
“Que no se transforme este tema en la nueva 125. Se está instalando en la sociedad y –aunque no lo quieran ver- enfrenta al ruralismo con los sectores urbanos”, anticipó en legislador entrerriano Nicolás Mattiauda advirtiendo que se sigue haciendo un aprovechamiento político fuerte, aunque el sector lo vea con liviandad.
Este zootecnista, consideró que se está desviando el concepto de producción sustentable y medioambiente, así como también, el sacrificio y esfuerzo de la producción agropecuaria.
“Esto que está yendo por debajo de la tierra, en algún momento podría explotar y no vaya a ser cosa que nos encontremos frente una nueva resolución 125 que vincula las discusión ambiental y de la salud humana”, agregó Mattiauda.