Un centro de capacitación y motivación permanente se afianza en la localidad de Bigand, una comuna ubicada a 70 kilómetros de Rosario, sobre la ruta Provincial Nº 14.
Se trata de TecnoAgro, que tuvo su primera edición a fines de marzo de este año y hace una semana volvió con su segunda vuelta y la perspectiva de transformar el pueblo en un epicentro de formación tecnológica agropecuaria hasta que se logren instalar las primeras escuelas especializada en producción y agroindustria, o en su defecto, alguna universidad vinculada con el tema.
“Nosotros queremos instaurar la idea de reunirnos para hablar de las nuevas tecnologías del sector. Buscamos que los estudiantes de escuelas agro técnicas de toda esta zona y el país, encuentren fundamentos sobre el futuro del campo, como impacta todo los que se viene. Entendemos que sobre esta base pueden elegir las carreras del mañana”, expresó Alejandro Ruggeri, presidente comunal.
El funcionario, remarcó que la muestra cuenta con el aval de la Bolsa de Comercio de Rosario y no descartó la posibilidad que esta institución de continuidad a algunos proyectos educativos en esta zona.
“Necesitamos que alguien les hable a los jóvenes, al igual que en los congresos que se hacen en las grandes ciudades, sobre la cadena agroindustrial, la biotecnología, sustentabilidad, agro finanzas, tecnologías aplicadas al segmento porcino y ganadero”, agregó Ruggeri remarcando que se trata de una exposición educativa donde el público general son estudiantes de todos los pueblos circundantes.
De la misma manera, situó a las empresas participantes, ya que el contacto que tienen con los alumnos o jóvenes responde a la posibilidad de explicarles que profesiones escasean o están ausentes en las empresas del sector y tienen demanda constante.
Por ahora TecnoAgro, se prepara para anunciar (2023) la irrupción de un centro de estudios con carreras terciarias o universitarias. La negociación avanza con varias entidades públicas, aunque también ha tenido una fuerte aceptación por parte de 3 universidades privadas.
También, otra opción parte desde las escuelas de oficios de varias empresas metalmecánicas que estarían evaluando la posibilidad de instalar módulos y academias para la formación de torneros, soldadores, pintores y demás.
Esta semana, 4 dirigentes de la Mesa de Enlace de Entidades Agropecuarias, fueron a TecnoAgro con el objetivo de motivar a los jóvenes para que se vuelquen a la formación de las gremiales del campo. Jorge Chemes, el presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), fue uno de los fervientes impulsores al pedirle al auditorio de alumnos que consideren formarse e incorporarse a la dirigencia por medio de los centros de capacitación que cada entidad tiene.
En ese escenario, varios dirigentes no descartaron la posibilidad de impulsar cursos en el lugar, durante los próximos años.
También se habló del movimiento cooperativo y fue el propio vicepresidente de Coninagro, Elbio Laucirica, quién pidió una mirada hacia el núcleo de desarrollo cooperativo que tiene la zona.
“Nosotros creemos que todavía las políticas de estado están ausentes en la generación de arraigo y educación en profesiones que hagan que la gente se quede en su zona. Hay que trabajar más con los jóvenes, con la innovación tecnológica, para avanzar en las soluciones de fondo”, subrayó Laucirica reconociendo que sigue siendo agotador dar vueltas siempre en la inflación, inseguridad, alta carga fiscal, así como la previsibilidad y confianza.
Al igual que lo hicieran otras instituciones a principios de año, esta segunda edición contó con la presencia de Aapresid Joven y parte del staff de la Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa.
“Los jóvenes son el foco para la oferta de los estudios con salida laboral que podrían traer el arraigo. Nos motiva que alguien haya percibido esto y entienda que con educación en el lugar, es posible frenar la migración a las grandes ciudades”, enfatizó María Augusta González, miembro de la Comisión Directiva de Aapresid agregando que no hay que dejar a los jóvenes solos sino darle impulso para que se incorporen y formen en muchas instituciones vinculadas a las cadenas productivas del país.
Según González, hay que mantener viva la posibilidad de poder elegir y en ese principio va la búsqueda de lograr que los jóvenes de queden en los pueblos, junto a sus orígenes echando raíces. Al cierre, resaltó que el avance de la conectividad es indispensable para el futuro del proyecto educativo que impulsa TecnoAgro desde Bigand.